Nuestra mente está llena de secretos y misterios fascinantes. Pero también hay algunas creencias que son muy populares pero no del todo ciertas. Existen muchos mitos y exageraciones sobre algunas informaciones.
Mito 1: ¿Usamos solo el 10% de nuestra capacidad? La idea de que solo utilizamos el 10% de nuestro cerebro es creencia falsa y fue expuesta por primera vez por Dale Carneige, un autor de libros de autoayuda que no era científico.Sin embargo, la investigación científica demostró que esto no es así.
Verdad: Funciona como un todo
Los científicos han comprobado que se necesita la totalidad del cerebro para su función normal y eso lo demuestra que el mínimo daño al mismo puede detectarse por síntomas neurológicos. No existen partes del cerebro sin utilizar o explorar como se creía antes.
Mito 2: Las personas ciegas desarrollan otros sentidos
Existe la creencia de que los ciegos por ejemplo, tienen una mejor audición y olfato. Para poder entender esto es necesario diferenciar entre tener más audición y aprovechar más los recursos disponibles. En el caso de los ciegos, se cree que poseen la audición, el olfato y el tacto más desarrollados.
La verdad sobre el olfato
Un estudio de Rosenbluth, Grossman y Kaitz publicado por el sitio de internet sin fines de lucre Psyblog.org no encontró diferencia alguna entre la habilidad olfativa de niños ciegos y niños videntes. Sin embargo, los niños ciegos mostraron una identificación más variada de olores, lo que sugiere que en realidad lo que sucede es que prestan más atención a lo que huelen.
¿Qué sucede con la audición y el tacto?
En todos los casos los resultados son similares: las personas ciegas se desenvuelven mejor que los videntes, pero porque dependen más de estos sentidos, como una habilidad desarrollada con el tiempo y la necesidad pero no a partir de una función cerebral determinada.
Mito 3: Un golpe en la cabeza cura la amnesia.
Lo hemos visto infinidad de veces en películas y telenovelas. Sin embargo, un golpe fuerte en la cabeza no cura la amnesia. Tampoco se consigue con hipnosis ni con la visión de un objeto muy apreciado. La neurocirugía tampoco ha podido hacer mucho en este sentido.
Verdad: El ejercicio ayuda
Hay un tipo de pérdida de memoria que viene con la edad, que mejorar al aumentar la irrigación de sangre que llega al cerebro. Para lograr esto, lo mejor es realizar ejercicio físico con regularidad durante al menos 30 minutos por día para mejorar la circulación, según un estudio de la Universidad de Princenton.
Mito 4: ¿Tenemos dos cerebros?
Existe la idea de que cada una de las mitades de nuestro cerebro tiene una función diferente. Mientras que la mitad izquierda seria la parte lógica, racional, verbal y científica, la derecha seria la espacial, emocional, intuitiva y creativa. Aquí nuevamente nos encontramos con una cuota de verdad pero exagerada.
Verdad: Más similaridades que diferencias
Roger Sperry, ganador del Premio Nobel en los años sesenta fue el primero en demostrar la prevalencia de las habilidades verbales en el lado izquierdo del cerebro. Sin embargo, las investigaciones posteriores coinciden en que para perder alguna facultad cerebral, deben estar dañados ambos hemisferios cerebrales y no uno solo
Mito 5: ¿Los recién nacidos se conectan al instante con su madre?
Existe la idea de que el bebé inmediatamente después de nacer reconoce y se conecta afectivamente con su madre. Si bien es cierto que las madres y padres enseguida sienten amor, este proceso lleva más tiempo para el bebé, de hecho el recién nacido se toma dos o tres meses hasta mostrar preferencia por alguno de sus cuidadores, según lo han estudiado.
Mito 6: ¿El alcohol mata las neuronas?
El consumo crónico de alcohol puede causar una reducción de las facultades mentales como la capacidad concentración o la memoria, pero esto no se debe a la destrucción de células o neuronas sino a que el alcohol afecta el funcionamiento de las dendritas que son la parte de la neurona que establece las conexiones entre las células del cerebro.
Verdad: Una copita al día no hace daño
Según un estudio de la Universidad de Princenton, todos los problemas mentales que trae la ingesta de alcohol son reversibles si la persona deja de tomar, ya que las dendritas neuronales vuelven a crecer. Si el consumo de alcohol es moderado, hasta tres copas en el hombre y dos en la mujer por día, no hay ningún tipo de daño cerebral, aseguran los expertos.
Mito 7:¿ La mente puede curar el cáncer?
El tema surge de un estudio realizado por la Universidad Stanford en el que se había demostrado que los pacientes con cáncer que recibieron apoyo psicológico vivieron el doble que el grupo control. Sin embargo, una mirada profunda sobre ese estudio sugirió que el grupo que tuvo apoyo vivió lo esperado mientras que la diferencia la registro el grupo control, cuyo final se precipito más de lo esperado.
Verdad: El compartir ayuda
Si bien aún no se ha podido relacionar el cáncer y el estrés en forma directa, algo que sí está demostrado es que los enfermos de cáncer que reciben tratamiento psicológico muestran una respuesta mejor al tratamiento, mejora su calidad de vida e incluso sienten una reducción del dolor.
Mito 8 ¿El tamaño del cerebro es un signo de mayor inteligencia?
La respuesta es no. Pero hay diferentes tamaños de cerebro, por ejemplo, el cerebro de los hombres es más grande de las mujeres, el de los bebes asiáticos mayor que el de los bebes blancos y aun mayores que el de los bebes afroamericanos. Tampoco la cantidad de pliegues en el cerebro guarda relación con la inteligencia.
Mito 9: ¿Es verdad que no existen niños enfermos mentalmente sino malos padres?
Un reporte de la Comisión Nacional de Salud Mental demostró que entre el 5 y 9 por ciento de los niños sufren perturbaciones emocionales serias que no dependen de la crianza. Esta condición mental es similar a la de los adultos, son producto de la interacción de factores sociales, biológicos y psicológicos, necesitan tratamiento y no son un mero capricho o llamado de atención.
Mito 10: ¿Nuestro cerebro puede distinguir una sonrisa falsa de una verdadera?
Sí. Recientes estudios han elaborado a través de tomografías computadas y estudios culturales la composición de una sonrisa científica y han descubierto que el cerebro reconoce la diferencia entre una sonrisa verdadera a través de la conexión y reproducción de los circuitos del cerebro de la mente de quien sonríe y el que recibe la sonrisa.
Verdad: La sonrisa une a las personas
Mirar una sonrisa verdadera, despierta los mismos circuitos en quien recibe la sonrisa. Existe una parte del cerebro llamada corteza orbifrontal que se activa si al recibir una sonrisa de otra persona esa sonrisa es verdadera y tenemos una relación emocional con la otra. El caso más emblemático para ver esto es la reacción cerebral de los padres al ver sonreír a su bebé.